CADA AÑO EL MINISTERIO FEDERAL DE EDUCACIÓN E INVESTIGACIÓN DE ALEMANIA (BMBF) ABRE NUEVAS POSTULACIONES | ESTE AÑO CONTARON CON 550 POSTULANTES DE MÁS DE 90 PAÍSES. EL JURADO SELECCIONÓ A 27 GANADORES DE DISTINTAS DISCIPLINAS Y ENTRE ELLAS A LA COCHABAMBINA ANDREA GUTIÉRREZ.
La cochabambina Andrea Gutiérrez Rojas nació en 1988, es Ingeniera Química de la Universidad Mayor de San Simón, Doctora en Ingeniería de procesos de minerales de La Universidad de Antofagasta y actualmente es Investigadora Postdoctoral en la Universidad de Antofagasta. OH! conversó con ella sobre el premio “Green Talents” que ganó el mes pasado.
“Desde que estaba en la escuela me gustaba mucho la ciencia y los números, incluso iba a clases de física en la Universidad de Chile, a través de programas para estudiantes de escuela los fines de semana, ya que pasé gran parte de mi niñez en Santiago hasta los 16 años. En secundaria ya estaba segura que estudiaría alguna ingeniería pero recién en último año me decidí por Ingeniería Química, principalmente porque me interesaba mucho entender y aprender acerca del “cómo" se hace todo lo que vemos o utilizamos día a día. Es decir, entender cuáles solo los procesos necesarios para pasar desde la materia prima hasta un producto terminado”, dice Guitierrez.
“Me vine a Chile a hacer un doctorado en Ingeniería en la Universidad de Antofagasta el 2012. El programa de doctorado en Ingeniería de Procesos de Minerales, lo conocí mientras desarrollaba la parte experimental de mi tesis de pre grado en la misma Universidad, bajo la dirección de la Dra. Svetlana Ushak, profesora asociada del departamento de Ing. Química y Procesos de Minerales de la UA, y con la asesoría del MSc. Ing. Sergio Carballo docente de la Universidad Mayor de San Simón en Cochabamba. Una vez que completé mi tesis de pre grado, inicié mis estudios de doctorado en la Universidad de Antofagasta, con beca completa por tres años del Ministerio de Educación de Chile”, indica.
La tesis doctoral de Andrea estuvo enfocada en desarrollar materiales de almacenamiento de energía térmica, en base a materiales de desecho de la minería no-metálica, los cuales fueron materiales inorgánicos compuestos principalmente por sales hidratadas. “Estos materiales resultaron muy promisorios para ser aplicados a baja y media temperatura. El desarrollo experimental se llevó a cabo parcialmente en Antofagasta y también en España durante la estadía de investigación de seis meses que realice en la Universidad de Lleida, junto al Grupo de Investigación de Energía Aplicada (GREA) dirigido por la Prof. Luisa F. Cabeza, donde pude aprender muchísimo debido a la amplia experiencia en la temática de la Prof. Cabeza y su grupo de investigación”, explica.
Como resultado de la tesis doctoral, se establecieron diversas colaboraciones internacionales, además de publicar varios artículos científicos en revistas de alto impacto en la temática y algunos artículos aún están en proceso de publicación, además de una extensa participación en conferencias internacionales, debido a la alta productividad mencionada. “Una vez que me gradué como doctora me ofrecieron el puesto de investigadora postdoctoral en la misma Universidad, específicamente en el centro de investigación avanzada del litio y minerales industriales-CELiMIN, para el periodo 2015, cargo que estoy ejerciendo actualmente. Mi tarea como investigadora a modo de continuación de mi tesis doctoral, es evaluar y caracterizar termo físicamente desechos de la minería, ahora tanto metálica como no metálica, para determinar su potencialidad como materiales de almacenamiento de energía térmica”, indica.
EL PREMIO GREEN TALENTS
“Green Talents” es una iniciativa del Ministerio Federal de Educación e Investigación de Alemania (BMBF por sus siglas en alemán), desde su lanzamiento en 2009, la competencia se ha convertido parte del programa marco del ministerio en “Investigación en Desarrollo Sustentable”, el cual llama la atención de la ciencia, negocios y política en Alemania en relación a estos temas.
“Es por esto que cada año el BMBF abre las postulaciones a este concurso, enfocado a la academia e industria. Este año la competencia atrajo a más de 550 postulantes de más de 90 países. El jurado seleccionó a 27 ganadores de distintas disciplinas, desde planificación urbana, biodiversidad, energías renovables y gestión de recursos en las implicaciones sociopolíticas de nuevas tecnologías. El premio está divido en dos partes, el primero es participar de un foro de sustentabilidad de dos semanas en Alemania, el cual se llevó a cabo desde el 17 al 31 octubre del presente año, en donde visitamos varias compañías e instituciones de Alemania con fuertes estrategias de sustentabilidad. Además, cada uno de nosotros tuvo la oportunidad de reunirse con tres expertos de su temática en universidades y centros de investigación, con el fin de conocer a detalle los proyectos de investigación en que están trabajando y de esta manera ver la posibilidad de futuras colaboraciones, para dar paso a la segunda parte del premio, que consiste en una estadía de investigación de tres meses el año 2016. Todos los gastos del foro de sustentabilidad y la futura estadía de investigación están cubiertos por el BMBF de Alemania”, comenta.
“Me enteré del premio ya que las postulaciones cerraban a principios de Junio y a mediados de agosto me hicieron llegar las cartas de notificación firmadas por el Sr. Wilfried Kraus, quien es el Director General Adjunto de la Dirección BMBF para la Sostenibilidad, Clima y Energía, y la carta de invitación oficial a través de correo electrónico, indicando que era una de los 27 ganadores seleccionados este año, un par de semanas después me llegaron las cartas físicamente a casa”, asegura.
EL CONCURSO
“El concurso consistió en una postulación en línea, en el que solicitaban la información completa de la experiencia y grados académicos, pero además las actividades extra curriculares que te relacionan con sustentabilidad, también solicitaban cartas de recomendación de investigadores o académicos en tu temática”, dice.
“De acuerdo a lo que dijo el jurado, me eligieron por el enfoque interdisciplinario y novedoso de mi trabajo enfocado a un campo de creciente importancia, como es el almacenamiento de energía térmica, pero además yo creo que porque busco utilizar materiales de desecho industrial para este propósito. Esto implica dar valor agregado a los desechos industriales generando potenciales nuevas líneas de negocio, también al encontrar una aplicación para los desechos estamos reduciendo fuentes de un potencial impacto negativo para el medio ambiente a largo plazo, y finalmente al utilizar materiales de desecho, es decir materiales gratuitos para almacenar energía térmica, reducimos los costos de inversión de los sistemas de almacenamiento, de manera que son más atractivos y hasta pueden competir con sistemas energéticos convencionales”, indica.
“Hasta el momento y en los siete años que se ha llevado a cabo el concurso, soy la única boliviana, pero espero simplemente ser la primera de muchos bolivianos que puedan asistir, formar parte de esta increíble red de investigadores y vivir esta gran experiencia”, asegura.
“Me siento muy contenta y afortunada, porque como investigadora creo en el gran impacto que puede tener mi trabajo, pero que lo reconozcan a nivel internacional es definitivamente un gran estímulo y me sirve de motivación para continuar con esta importante temática de investigación. Yo les diría a los jóvenes bolivianos que el primer paso es encontrar su vocación, que se pregunten siempre si lo que hacen es porque ellos anhelan hacerlo o porque alguien más les dijo que lo hicieran, y esto en todos los rubros no solo académicos. A partir de ese momento, que sueñen en grande y pongan su corazón en todo lo que hacen, que crean en sus sueños y en sí mismos, y que por sobre todo sean perseverantes y disciplinados, que se arriesguen por lo que anhelan aunque fallen una y mil veces que sigan intentándolo, no hay un solo camino para lograrlo. No va a ser nada fácil, pero, y aunque yo recién estoy empezando a alcanzar algunas de las metas que me voy trazando, les aseguro que vale la pena”, explica.
Entre los planes a futuro de esta joven emprendedora son crecer en el área de la investigación y la academia, lograr una posición fija en una universidad con posibilidades de tener un grupo de investigación, o tal vez ser parte de un centro de investigación con colaboraciones en la universidad, pero además estoy planificando algunos proyectos enfocados a educación y dirigidos a países en desarrollo, como lo es Bolivia y muchos países de Latino América, creo que es muy importante retribuir y aportar con nuestro conocimiento a nuestro lugar de origen, de modo que me gustaría colaborar y aportar a la educación, que es tan necesaria para que un país y una región prospere. El proyecto aún está en su primera etapa, pero espero poder avanzar activamente, concluye.
No comments:
Post a Comment